Hungría obliga a las mujeres a escuchar el latido del feto antes de abortar
Desde hoy, las mujeres húngaras que deseen abortar deberán primero ser informadas sobre los signos vitales del feto, antes de tomar su decisión.
El Gobierno de Hungría ha aprobado un decreto que obliga a las mujeres que quieran abortar a escuchar antes el latido del corazón del feto. La medida, que entra en vigor hoy, ha preocupado a activistas por los derechos de las mujeres, pues consideran que es el camino que han seguido otras naciones para finalmente prohibir el aborto.
En una publicación de Twitter se afirma que en Hungría, un decreto del Gobierno obliga a las mujeres a escuchar el latido del corazón del feto, antes de tomar la decisión de abortar. Esta información es cierta.
El lunes, el ministro de Interior, Sándor Pintér, emitió un decreto con el que dispone que el formulario de solicitud de aborto incluya la garantía del ginecólogo de que ha mostrado a la mujer una “clara identificación de los signos vitales del feto”.
Esto ha sido interpretado como un decreto que determina que, antes de abortar, la mujer debe presentar un documento que certifique que ha recibido información sobre los signos vitales del feto, es decir, que haya escuchado los latidos del mismo, según reporta El País.
El Gobierno nacionalista, que ha estado en el poder desde hace 12 años, ha asegurado en varias ocasiones no tener intención de restringir el derecho al aborto.
La actual Ley, que rige en ese país desde 1992, determina que entre las semanas 12 y 24 de gestación, la mujer puede optar libremente por el aborto, sin más requisitos que su propia decisión.
Por ello, varias oenegés y colectivos que defienden los derechos de las mujeres han considerado a esta decisión como una muestra de la intención de restringir de alguna forma este derecho.
Por su parte, la presidenta del país, Katalin Novák, de corriente derechista, prometió en su campaña electoral que apoyaría a aquellos que «protegen la vida desde la gestación», según reporta Deutsche Welle.
La AFP asegura que en Hungría, país de 9,7 millones de habitantes, se registraron 21.907 abortos y 93.000 nacimientos en todo el año pasado, según datos de la Oficina de Estadísticas.
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